Autos Eternos

La era Dodge – Parte I

Cuando Chrysler Fevre Argentina tomó la decisión de remplazar la exitosa línea Valiant, que había iniciado su participación en el país dentro del segmento de automóviles de pasajeros, lo hizo de una manera arriesgada y poco común. En un hecho inédito para nuestra industria, una empresa internacional desarrolló una versión de características únicas para el mercado argentino, que posteriormente también se fabricaría en España.

El punto de partida fue el modelo Dart, presentado en Estados Unidos en 1967, el cual recibió una carrocería totalmente nueva, de poco más de cinco metros de longitud y algunos toques de diseño europeizantes como su frontal con exclusivos faros rectangulares e innovadoras soluciones como los cristales laterales curvos. En agosto de 1968 fueran embarcadas hacia Estados Unidos las primeras unidades de prueba, montadas en la planta de San Justo, para ser sometidas a severos ensayos por parte de Chrysler Corporation. Aprobados los tests, el nuevo modelo fue lanzado comercialmente en noviembre de 1968 bajo la denominación Dodge. De esta manera, se unificaba la nomenclatura de todos los productos de la penta estrella bajo esa marca. “El comienzo de una nueva era”, como rezaba la campaña publicitaria, estaba integrada por cuatro nuevos modelos que heredaban las designaciones de la línea remplazada y sumaban una nueva: Coronado, GT, Polara y Valiant.

Las cuatro versiones compartían la misma carrocería de tipo sedán de cuatro puertas, pero se diferenciaban por su nivel de equipamiento y motorizaciones. El modelo base era el Valiant, que mantenía el motor de 3688 cc y 137 hp, rebautizado como Slant Power. Ofrecía un sencillo interior con dos asientos enterizos donde se distribuían cómodamente seis pasajeros. Los frenos eran a tambor en las cuatro ruedas. En el otro extremo, se presentaba el GT, versión deportiva que heredaba de su antecesor Valiant el mismo propulsor con carburador de doble boca y 155 hp (motor A-119), pero incorporaba algunos detalles deportivos como la caja de Daytona Barracuda de cuatro marchas totalmente sincronizada con palanca al piso sistema Hurst. El interior se destacaba por sus butacas individuales con cinturones de seguridad. Los frenos delanteros eran a disco, de potencia, y calzaba neumáticos anchos Speedway Gransport, sin cámara para alta velocidad.

El Coronado seguía siendo la versión de lujo. Salía de fábrica con techo vinílico, tapizado en cuero y detalles ornamentales de madera en el tablero y paneles de puertas. En una posición intermedia entre el Valiant y el Coronado, se ubicaba el Polara. Los motores del Polara y Coronado eran iguales, tenían la misma relación de compresión que el del GT (8,4:1), pero al tener carburador Carter de una sola boca la potencia disminuía a 145 hp.

Los medios de prensa agrupados en APICA, reaccionaron rápidamente y, a pocas semanas de su presentación, otorgaron al nuevo Dodge el título de auto del año 1968.

Podés leer la Segunda parte de La era Dodge haciendo click en el enlace adjunto:

http://autosdelpodio.com.ar/inicio/index.php/component/content/article/3-newsflash/1116-la-era-dodge-parte-ii.html

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