Autos Eternos

La era Dodge – Parte II

En 1970, dos novedades se sumaron para completar la línea y ofrecer nuevas opciones. El Dodge Coronado se convirtió en el primer automóvil nacional en ser equipado con caja automática. La transmisión utilizada fue una Torqueflite A-904 de tres velocidades.

La otra novedad fue la presentación de la coupé GTX. Esta denominación era utilizada en Estados Unidos para las versiones deportivas de Chrysler, pero nunca se había empleado para un modelo con la marca Dodge. Estaba equipada con el motor V8 de origen mejicano (que ya equipaba a la pick up), de 5210 cc (318”) y 212 hp que la transformaba en el auto más potente de la industria argentina. Este motor llegaba al país a cambio de cajas de velocidades que se exportaban a Méjico, dentro del marco de intercambio comercial establecido en la ALALC (Asociación Latinoamericana de Libre Comercio). También se la ofrecía opcionalmente con el motor de seis cilindros del sedán GT.

Dos detalles deportivos acentuaban su carácter. En el interior, la palanca de cambios al piso a gatillo para la marcha atrás y en el exterior, la tapa de acceso tipo gatillo (Quick Open) para la carga de combustible con la leyenda “Fuel”.

Dentro del programa de exportaciones no tradicionales, a comienzos de 1970 fueron enviadas dos carrocerías cuatro puertas para ser utilizadas como base en el desarrollo del Dodge 3700, modelo español que con leves modificaciones en la carrocería como la parrilla, luces delanteras y traseras y en el panel de instrumentos, era similar al argentino.

En 1972 la línea recibió una leve modificación estilística y mejoras como la incorporación de encendido electrónico.

La oferta se amplió con la presentación de la coupé Polara, que con el mismo equipamiento de su similar cuatro puertas -selectora de tres velocidades en la columna de dirección y frenos a disco delanteros opcionales- resultó un rotundo fracaso comercial. Para paliar este traspié, la empresa reaccionó un año más tarde con la versión RT, una opción más accesible que la GTX, pero de muy buenas prestaciones. Estaba equipada con el motor seis cilindros RG 225 de 3688 cc que con un carburador Holley de doble boca lograba una potencia de 174 hp y una velocidad cercana a los 180 km/h. En el exterior, se destacaba por sus colores vivos y dos franjas longitudinales decorativas interrumpidas a la altura del guardabarros trasero para alojar las letras “RT”, denominación que hacía referencia la revista norteamericana Road & Track. Por su parte, la potencia del motor V8 de la GTX fue elevada a 230 hp.

Sin grandes novedades, la producción de estos modelos se mantuvo hasta mediados de 1980. Ese año, la filial argentina de Chrysler fue adquirida por Volkswagen. Con este cambio de timonel la vida de los Dodge grandes llegó a su fin.

Podés leer la Primera parte de La era Dodge haciendo click en el enlace adjunto:

http://www.autosdelpodio.com.ar/inicio/index.php/component/content/article/39-destacados-side/1107-la-era-dodge-parte-i.html

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