Primer auto importado después de la guerra
Una de las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial que se padecieron en nuestro país fue la estrepitosa caída de la importación de vehículos a partir de 1942.
Finalizado el conflicto bélico, el comercio internacional comenzó a reactivarse lentamente. Luego del forzado paréntesis, el 9 de octubre de 1945 llegaba al país el primer automóvil importado de posguerra. Se trataba, en realidad, de tres unidades Austin 8, importadas por la empresa Buxton Limitada, que arribaron al puerto de Buenos Aires a bordo del “Empire Confidence”. Los Austin fueron desembarcados el 25 de octubre.
Según la crónica de la revista “Automovilismo”, órgano oficial del Automóvil Club Argentino, “estos vehículos vienen dotados de motor de cuatro cilindros, con válvulas al costado y cabeza desmontable. La caja de velocidades es de cuatro marchas hacia adelante y una para retroceso. El rodado es de ruedas a disco de acero prensado, de fácil limpieza. El chasis especial y el piso forman una sola unidad completamente soldada, dando así una fortaleza adicional a la torsión, y la carrocería está abulonada al bastidor en muchos puntos. Las puertas son amplias, siendo los asientos delanteros y traseros de nuevo diseño para hacerlos más confortables. Los paneles interiores, incluyendo el techo, son antisonoros, habiéndose pulverizado con material especial”.