Toyota Hilux: la pick up millonaria – Parte I
La apertura de importaciones registrada a partir de 1979 produjo un fuerte impacto entre los usuarios argentinos. Marcas hasta entonces apenas conocidas a través de las publicaciones especializadas comenzaron a invadir las calles y rutas de todo el país. Entre ellas, se destacó la presencia de Toyota.
Entre 1979 y 1982 la automotriz japonesa gozó de una importante demanda sostenida por el éxito de dos modelos como la pick up Hilux y la cupé Celica, que dejaron una marcada impronta en el escenario local.
La importación masiva fue breve, pero a pesar de su repentino cierre Toyota pudo seguir importando limitadamente algunas Hilux hasta mediados de los años 80, gracias a una excepción particular del régimen que habilitaba la importación de utilitarios.
Sin embargo, el público argentino debió esperar hasta la década siguiente para retomar el contacto con la marca y el modelo. El nuevo contexto que determinaba la puesta en marcha del MERCOSUR generaba una oportunidad para las automotrices que veían en la integración regional la posibilidad de hacer pie en un mercado ampliado.
En 1993, Toyota Corporation decidió su radicación industrial en Argentina como parte de una estrategia de expansión global. La automotriz japonesa adquirió 132 hectáreas en la localidad de Zárate, al norte de la provincia de Buenos Aires, para la construcción de la planta industrial que oficialmente se inició el 5 de diciembre de 1994.
El 9 de diciembre de 1996 se presentó la primera pick up Hilux argentina realizada bajo pruebas de producción. La planta fue oficialmente inaugurada el 21 de marzo de 1997 y se convirtió en la número 29 de la marca en el mundo. La inversión de Toyota fue la primera de una automotriz de origen japonés y alcanzó los 150 millones de dólares entre equipamiento y capacitación del personal empleado que inicialmente era de 750 personas.
Desde allí comenzó a producirse la pick up Hilux con motor diésel de 2800 cc, en versiones de cabina simple y doble y con tracción simple o 4×4. El modelo nacional correspondía a la 5ª generación del utilitario japonés. La producción inicial estaba prevista en 10.000 unidades anuales, a un ritmo de 48 diarias. La fabricación de la pick up liviana de Toyota tenía como destino tanto el mercado local como la exportación a países de la región que recibían alrededor del 50% de las unidades que salían de la planta de Zarate.
La demanda resultó tan intensa que en 1998 la producción se duplicó al incorporarse un nuevo turno. Rápidamente, la pick up Hilux se consolidó como líder en su categoría con el 30 % de participación.
Con el comienzo del nuevo milenio llegó una nueva generación que incluyó un rediseño y actualización en motorizaciones y equipamiento. El 24 de noviembre de 2003 se produjo la unidad 100.000.